DE REPOSTERA A ACTRIZ PORNO

Hace un par de meses estaba buscando curro en mi ya habitual aplicación para el móvil de buscar trabajo y me apareció un anuncio en el que podía leer “se busca mujer para bukake”. Yo, que había dado un curso de repostería hace un par de años, recordé que la profesora nos comentó que ahora se han introducido bastantes anglicismos en el mundo de la repostería y que a la magdalena ya no se le llamaba magdalena, ahora se le llamaba “cukake” o algo así, y rápidamente mi cerebro de inútil relacionó…

Pues allí me tenías que ver en la prueba, sentada con un delantal, una bolsa de plástico en la mano con harina, chocolate, azúcar y mantequilla, al lado de tres mujeres vestidas de leopardo y con menos ropa que uno que se está duchando.

Para colmo me llamaron la primera, y ahí iba yo, dispuesta a hacer “cukakes” de esos hasta dejar el horno seco.

Cuando me di cuenta de lo que verdaderamente estaba pasando me quedé un poco a cuadros, pero salvé la situación y mañana ruedo mi cuarta película porno.